Cómo cuidar a mi perro en invierno

Diciembre 2023

Lectura: 4 min.

El frío y la humedad entran con el invierno y en esta estación los lomitos que son más propensos a enfermarse son los cachorros, los de edad avanzada, los braquicéfalos (perros de hocico chato y pliegues faciales), las razas pequeñas, los que están recuperándose de alguna enfermedad o cirugía y aquellos que tienen poco pelaje.

Pero que todos no sean igual de vulnerables a las bajas temperaturas, no quiere decir que los demás integrantes del mundo de los perros estén exentos de padecer algún problema respiratorio y que éste pueda complicarse si no se tienen los cuidados necesarios.

RECOMENDACIONES PARA CUIDAR LA SALUD DE TU LOMITO EN INVIERNO.

La hora del paseo.

Para evitar exponer a tu perro a un cambio en su temperatura corporal lo mejor es reducir la duración de la salida. Además, si lo mantienes mucho tiempo al aire libre con temperaturas bajas, su hocico, cola, orejas y almohadillas podrían agrietarse y sufrir alguna lesión.

Trata de sacarlo cuando el frío sea menos intenso y de preferencia procura pasearlo cuando haya solecito.

Si se moja, sécalo perfectamente al llegar a casa y pon especial atención en sus patas y barriga. Si notas que tiembla, cúbrelo con una manta gruesa seca y acércalo a una fuente de calor.

Concentraciones de perros.

Éstas suponen un riesgo para la transmisión de enfermedades invernales como la tos de las perreras (equiparable a un catarro humano), la parainfluenza y el virus del moquillo e incluso la bronquitis o la neumonía, sobre todo en cachorros y perros ancianos.

El contagio puede ser muy rápido entre ellos, así que, si no estás familiarizado con los peludos que encuentren durante su paseo, mejor eviten el contacto con ellos.

Ropa de invierno perruna.

No siempre es necesaria, pero si es un cachorro o tiene edad avanzada, es de poco pelaje o sufre de artritis, tenerlo abrigado puede ayudarlo a mantener su calor corporal.

Momento del baño.

En esta temporada, para evitar eliminar los aceites naturales que protegen su piel de la resequedad que causa el frío, reduce la frecuencia del baño. Para su limpieza puedes ayudarte con las Toallas Húmedas para un Baño Express de Ludos® con aloe vera y vitamina E.

Cuando lo bañes, hazlo con agua tibia y en un lugar que no tenga corrientes de aire. Sécalo perfectamente; en invierno no puedes dejar que su pelo se seque con el viento, ni que tu peludo permanezca húmedo durante mucho tiempo.

Alimentación.

El frío hace que los perros quieran comer más de lo habitual, su instinto les alerta que así conservarán mejor el calor corporal. Si duerme en exteriores, aumenta un poco su ración, fundamentalmente con proteína de buena calidad. Si pernocta en tu casa no le pongas más alimento del necesario porque podría aumentar de peso, sobre todo si, por el clima, se reduce su actividad. Checa que el agua que tome nunca esté fría.

Vacunas.

Ten sus vacunas básicas al día: la quíntuple y la séxtuple lo protegerán del virus del moquillo y otras infecciones comunes en esta época. Si presenta síntomas como tos, moqueo o dificultad al respirar, llévalo al veterinario.

SITUACIONES DE ALTO RIESGO EN INVIERNO PARA LA SALUD DE TU PERRO

Las bajas de temperatura crean el ambiente perfecto para que proliferen virus y bacterias que pueden infectar tanto a humanos como a los peludos. Y, aunque cuides a tu mascota cuando está en exteriores, es importante que tomes en cuenta el contraste que hay entre el clima que experimentan afuera y el que viven en espacios cerrados. Por eso te aconsejamos que:

  1. Si en tu casa tienes puesta la calefacción, apágala 20 minutos antes de sacar a tu lomito a la calle para evitar que experimente un cambio brusco de temperatura, tanto al salir como al regresar.
  2. Evita llevarlo de paseo a lugares cerrados que tengan calefacción, como los centros comerciales “pet friendly”, donde además puede llegar a entrar en contacto con el virus de algún perro infectado.

El invierno es una época donde, además del frío, nos rodea un sentimiento de amor y amistad. ¡Qué mejor que compartir estas emociones con un peludo sano y agradecido dentro y fuera de casa!

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