Resulta que tu lomito es un excavador profesional y está convirtiendo tu jardín en un campo de guerra. Hay muchas razones por las que puede presentar este comportamiento. Para algunas de ellas hay soluciones sencillas, para otras el camino es más largo y laborioso, pero si eres constante y paciente lograrás que tu mascota desista de arruinar tu césped.
Hay perros que, aunque olfatean el pasto, nunca excavan. Sin embargo, lo natural y común es que hagan hoyos en alguna ocasión, está en su ADN. La diferencia es la frecuencia con que lo ejecutan. Algunas razas sólo lo hacen en determinadas circunstancias, mientras que otras tienen una mayor predisposición (Terriers, Dachshunds, Huskys) y es difícil (no imposible) terminar con esa incesante necesidad de escarbar.
Antes de tomar cualquier medida correctiva, es importante que distingas los motivos por los que tu perro se porta así.
POR QUÉ LOS LOMITOS ESCARBAN EN LOS JARDINES.
- Forma parte de su instinto. Éste los lleva a enterrar sus tesoros, como juguetes o huesos, para ocultarlos de otros depredadores.
- Los perros poseen un oído y olfato muy desarrollados, dientes para cazar y desgarrar presas y está en su naturaleza hacer hoyos donde detectan un posible botín. Las razas cazadoras se llevan el primer lugar.
- Las hembras tienen un instinto de anidación y cuando están por parir hacen pozos profundos para poner a sus crías a salvo de posibles amenazas.
- También puede que escarben si están muy acalorados. Al cavar dejan al descubierto tierra más fría y crean un pequeño refugio para refrescarse. En invierno lo que buscan es tierra más cálida.
- Algunos lomitos hacen hoyos para divertirse, desestresarse, quemar energía contenida o evitar el aburrimiento.
- Aunque no es común, hay algunos peludos que sienten miedo al quedarse solos en el jardín y, como lo harían sus presas, hacen un hoyo para resguardarse.
CÓMO EVITAR QUE TU PELUDO HAGA HOYOS.
Los castigos no son eficientes para corregir comportamientos en las mascotas y, en este caso, de nada servirán. Escarbar en el jardín es un comportamiento natural por lo que si castigas a tu lomito o tratas de suprimir esa conducta, puedes ocasionar problemas en su salud y bienestar. Si ya tienes una idea del porqué de su afán excavador, te podrán servir los tips que a continuación te damos:
- Permite que pase más tiempo dentro de casa para que se sienta acompañado. Así, cuando tu salgas a la calle, llegará a entender que a él le toca salir al jardín y que, en algún momento, ambos regresarán al hogar.
- Sácalo a pasear, a correr, tírale la pelota y juega con él para que canalice y elimine esa energía nerviosa. Además de que lo cansarás, lo tendrás entretenido. El juego, el ejercicio y las atenciones modificarán su conducta de forma positiva. Trata de hacerlo diariamente para que se mantenga relajado.
- La visita de un fumigador, que utilice métodos ecológicos, podría ser la solución si tu perro está alborotando la tierra en busca de alguna presa que haya detectado.
- Pon a su alcance diversiones perrunas: juguetes, huesos de carnaza, pelotas y todo lo que lo pueda mantener entretenido y desestresado.
- Asegúrate de que en el jardín cuente con un lugar de descanso fresco para resguardarse del calor y que sea cálido en épocas de frío. Procura que el piso le quede cómodo con una camita o cobija.
QUÉ HACER EN CASOS DE PERROS CAVADORES COMPULSIVOS.
Hay lomitos, sobre todo en las razas antes mencionadas, con los que tenemos que hacer algunas concesiones. El proceso de enseñanza supone tomar algunas medidas “extremas”, más trabajo y mucha paciencia. Pero al final el resultado valdrá la pena.
- En el jardín dedica un espacio donde pueda desahogarse y cavar hasta cansarse. Puedes construir un arenero, cercar un área o rellenar una tina grande con arena. Ahí puedes enterrar juguetes o huesos para que se entretenga un rato. Tendrás que pasar un buen tiempo con él para que entienda que solo ahí puede escarbar.
- Si le asustan los ruidos fuertes, pon globos inflados en los hoyos que va cavando y tápalos ligeramente con tierra. Cuando regrese a escarbar, éstos reventarán y, después de algunos sustos, bajarán sus ansias de hurgar. Retira los pedazos de hule antes de que se los coma.
- Cuando vayas a tapar uno de los hoyos, no lo hagas frente a tu lomito, porque lo va a tomar como un juego: “Yo hago un desastre y tú lo tapas”.
- El experto Hervé Collette recomienda en YouTube que, para que tu lomito deje de escarbar en el jardín, deposites su popó en los hoyos que haya hecho y posteriormente los tapes con tierra. Una técnica sencilla que, dice, funciona de maravilla y quienes la han probado la recomiendan.
- No regañes a tu peludo a menos que lo sorprendas en el acto de excavación. Si lo haces a destiempo, no será capaz de asociarlo con su acción.
Recuerda que a los lomitos no debemos bañarlos muy seguido, pero a las mascotas excavadoras hay que asearlas constantemente, para lo que te recomendamos las Toallas Húmedas para un Baño Express de Ludos® con aloe vera y vitamina E.